La Rejilla de Meditación de las Seis Virtudes del Corazón


Dentro del primer año, normalmente hacia su final, el practicante de vivir desde el corazón será cada vez más consciente de un sistema o estructura dentro del cual ellos están operando, que se podría comparar a una rejilla de energía que los rodea. Sería similar a visualizar la rejilla, representada seguidamente, y operar en el círculo central, que es la posición simbólica del amor divino –la intersección de las seis virtudes del corazón.


Operar desde el interior de esta rejilla es una forma de meditación, aunque no como normalmente consideramos la meditación: el estado interno de conciencia relajada. Se trata más de un estado externo de conciencia y expresión activas, pero es uno que surge desde la estabilidad de vivir en el “círculo central” del amor divino, sabiendo que estás rodeado con las habilidades de la práctica cuándo-cuál-cómo. Esta práctica hace posible que surjas desde tu centro hacia cualquier dirección, para impregnar un encuentro con la energía emocional apropiada. Esta es una energía curativa, reequilibrante y revitalizadora desde tu corazón, para compartirse a sí misma con cualquier circunstancia o condición humana.

Esta es una meditación activa que se practica durante el día y requiere un grado de visualización mientras te mueves de un encuentro a otro. La visualización que puedes tener en tu imaginación es que la rejilla de las seis virtudes del corazón te rodea como un holograma energético, extendido entre 3-5 metros en todas direcciones, desde tu cuerpo. Conforme practicas esta visualización, con el tiempo comenzarás a verla como extensión de tu cuerpo energético, no una rejilla imaginada separada sino la estructura real de tu cuerpo energético. Esto sustituye la persistente abstracción del sistema de chakras de colores, frecuencias y rasgos asociados a éste.

El factor vital es que imagines la parte más central de tu ser capturado en la red de amor divino. Es como si tu existencia —sin importar en donde estés físicamente en el mundo, o donde quiera que te encuentres— fuera saturada de amor divino y magistralmente conectada con las seis virtudes del corazón y sus 63 variaciones. Esta red energética, anclada en amor divino, es capaz de movilizarse hacia dentro y ensamblar su expresión de las seis virtudes del corazón con un virtuosismo cada vez mayor.

La meditación de la red de las seis virtudes del corazón es un medio para anclar el marco de trabajo dentro de tu vida diaria. Es un sendero para que tú sientas los principios en tus comportamientos, mediante el proceso imaginativo de tu mente y la composición de la creencia de tu corazón, trabajando conjuntamente en alineación a la intención formativa de vivir desde el corazón.